Si, hay que decirlo. Estoy muy feliz. Ayer fue lejos lo más especial que me ha pasado últimamente, y pese a que igual tenía mis expectativas y muchas esperanzas puestas en lo que iba a suceder, superó con creces lo que yo esperaba.
YA NO TENGO MIEDO DE DECIRLO... TE QUIERO
Permíteme poder darte hoy lo que ayer te negué,y jugarme entero por lo que una vez dejé morir...
Ya lo sabes... Hoy ocupas el lugar que te mereces en mi corazón, y lo haré valer.
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