En búsqueda del País de Nunca Jamás

Ayer... en uno de esos arranques de sensibilidad extrema que me dan de repente... no hallé nada mejor que ponerme a ver películas. La verdad no iba con muchas expectativas respecto de "Finding Neverland"... típico... historia repleta de clichés... el jovencito soñador... la gente que no lo comprende... la familia mal constituida. Pero saben que?... el contenido trasciende esta realidad. Su mensaje va más allá de lo que cada uno de nosotros puede ver a simple vista: aprender que la confianza que uno tiene en sí mismo es trascendental al momento de querer conseguir nuestros sueños y metas. Saber que si uno ve con los ojos y el corazón de un niño... podrá siempre seguir adelante. Debemos escuchar al niño que fuimos un día y que todavía somos, y que existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de momentos mágicos. Podemos reprimir su llanto, pero no podemos acallar su voz. Si no nacemos de nuevo, si no volvemos a mirar la vida con la inocencia de la infancia, no tiene sentido seguir viviendo... Miremos la vida con los ojos y el corazón de un niño.